Para Iván

El intendente Octavio, la princesa Alba, Parabirabí Parabirabá el burro orejón, Lhahl la novia de Bhuhb y Bhuhb se subieron al tren que partía rumbo a San Petesburgo que es una ciudad de Rusia, al norte del bosque de Bhuhb.

El tren lanzó un largo pitido, un poco de vapor y empezó a andar. "Tatrac tatrac, tatrac tatrac", cantaba el tren.

En el tren estaba un Ivanovich, el monito colorado, que venía de Rusia y que los llevaba a todos de visita a su casa.

Después de un ratito ya estaban todos dormidos y no se dieron cuenta cuando llegaron a Rusia.

Hasta que de repente se escucha "¡Kvarsira Nomer Adin!", y todos se despertaron de golpe.

"Bienvenidos a Rusia", dijo Ivanovich el monito colorado bailando la Polka, que es un baile ruso. "Mi nombre es Ivanovich, y soy su anfitrión". Pero todos ya sabían eso porque lo habían conocido cuando salieron del bosque. Por supuesto, no les importó porque los llevó a todos a jugar con la nieve.

Hicieron muñecos de nieve, jugaron a la guerra de nieve y a la fábrica de helados.

Más tarde, Parabirabí Parabirabá, que siempre gana en los concursos de muñecos de nieve, preparó chocolate caliente para todos.

 

El tren
 

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La Portada

 

Las Aventuras de Bhuhb. Textos de Federico Joselevich e ilustraciones de Paola Stefani. Textos © 1998-2007 by Federico Joselevich. Ilustraciones © by Paola Stefani.